Nord Stream 2: Gasoducto en disputa con la UE se convierte en controversia bajo TCE

Una disputa latente de larga data por los planes para construir dos nuevos gasoductos que llevarían gas natural desde Rusia a Alemania ha avanzado rápidamente en los últimos meses, luego de que la empresa Nord Stream 2 presentara una notificación de arbitraje contra la UE bajo el TCE el 26 de septiembre de 2019. Según Nord Stream 2, lo que se cuestiona es una serie de cambios a las actuales regulaciones de la UE que fueron anunciados hace dos años, que según reclama la empresa perjudicaron sus inversiones por distintas razones.

Nord Stream 2 —de propiedad de la empresa productora de gas rusa, Gazprom, pero cuya central se encuentra en la ciudad suiza de Zug— pretende construir dos gasoductos que complementarían los actuales gasoductos bajo el proyecto original de Nord Stream. Casi 2.000 kilómetros de gasoducto ya fueron construidos en el Mar Báltico, según un anuncio de agosto de 2019 en el sitio web de la empresa.

Si se terminan, estos gasoductos permitirían que el gas natural de Rusia fuera transportado directamente al norte de Alemania, pasando por Polonia y Ucrania, siendo los mismos construidos bajo el agua en lugar de sobre la tierra.

En su notificación de arbitraje, según extractos de noticias, Nord Stream 2 reclama que la iniciativa de la UE para revisar su Directiva sobre el Gas del Tercer Paquete Energético hace dos años, y por ende, aplicar las mismas regulaciones a los gasoductos de terceros países que entran al mercado de la UE que las aplicadas a gasoductos puramente internos, ha violado el estándar TJE bajo el TCE. La empresa también reclama que el trato es discriminatorio.

Las revisiones afectarán aquellas partes del gasoducto que se encuentran en las aguas territoriales de los Estados miembros de la UE, y Nord Stream 2 no tiene la opción de negociar una suspensión de los cambios debido a su fecha de inicio de operaciones.

«Nord Stream 2 AG ahora ha decidido solicitar al tribunal arbitral que dictamine que la Unión Europea se encuentra en violación de sus compromisos bajo el derecho internacional en virtud del [tratado] y que emita la orden de que la UE cese esta violación», dijo Sebastián Sass en nombre de la empresa, según comentarios reportados por varios canales de noticias. Notablemente, la empresa también ha entablado una demanda similar contra el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo ante el TJUE, solicitando la anulación de los cambios.

La Comisión Europea, por su parte, anteriormente describió su iniciativa de revisar la Directiva sobre el Gas, la cual apunta a los gasoductos que entran y operan en el mercado de la UE, como “no destinada a impedir la construcción de cualquier gasoducto nuevo” en respuesta a preguntas sobre si la iniciativa estaba vinculada con los planes de Nord Stream 2. Bruselas señaló que la situación con la empresa es una de tantas que demuestran la necesidad de mayor “claridad jurídica” en esta área dados los múltiples marcos regulatorios anteriormente involucrados.

Estos acontecimientos justo llegan cuando los miembros del TCE se preparan para las negociaciones para modernizar este acuerdo que tiene décadas de antigüedad, el cual ha enfrentado un duro escrutinio sobre varios aspectos a lo largo de los años, incluyendo los famosos laudos con altos niveles de compensación. También se han planteado preguntas sobre si los miembros del TCE deberían considerar su terminación o retiro como una opción.