Tribunal de la UE Anula Acuerdo Pesquero con Marruecos, Respalda al Polisario
Un tribunal de la Unión Europea ha anulado los acuerdos comerciales y pesqueros del bloque con Marruecos, señalando que se requiere el consentimiento del pueblo del Sahara Occidental para implementar los acuerdos que cubren su territorio.
El Tribunal General de Justicia de la Unión Europea ha anulado los acuerdos comerciales y pesqueros del bloque con Marruecos, al determinar que los mismos fueron acordados sin el consentimiento del pueblo del Sahara Occidental.
Marruecos anexó un vasto territorio de la costa atlántica de África en 1975 luego de la retirada de España de lo que en ese entonces era el Sahara español. Marruecos considera a este territorio, ahora conocido como Sahara Occidental, de su propiedad. Sin embargo, la anexión no fue internacionalmente reconocida y suscitó la oposición del Frente Polisario que, con el respaldo de Algeria, libró una guerra de guerrillas por 16 años contra el reino de Marruecos El año pasado, Estados Unidos reconoció la soberanía de Marruecos sobre el Sahara Occidental. Además, hasta la fecha, más de 20 Estados, en su mayoría africanos y árabes, han abierto consulados en este territorio rico en recursos naturales.
En 1991, Naciones Unidas medió un alto el fuego entre Marruecos y Polisario e instó a una solución política mutuamente aceptable al conflicto. Marruecos propuso la autonomía del Sahara Occidental, pero Algeria y el Frente Polisario rechazaron esa propuesta, insistiendo en un referéndum que incluyera la independencia como opción. Este referéndum nunca se llevó a cabo.
Por motivo del acuerdo con la UE, el TJUE determinó, primero, que el Frente Polisario tenía la facultad jurídica para iniciar un procedimiento ante los tribunales de la UE, algo que fue cuestionado por los demandados; segundo, coincidió con la opinión del Polisario de que se requería el consenso del pueblo del Sahara Occidental para implementar los acuerdos que cubren este territorio y que no se podía considerar que las medidas adoptadas por las autoridades de la UE, incluyendo las consultas, garantizaran dicho consentimiento.
“El tribunal considera que, en la medida en que los acuerdos controvertidos se aplican expresamente al Sahara Occidental, así como, por lo que respecta a la decisión concerniente al Acuerdo de Colaboración de Pesca Sostenible, a las aguas adyacentes a este territorio, afectan al pueblo de dicho territorio y requieren que se obtenga su consentimiento”, dictaminó el tribunal.
Marruecos Planea Apelar la Sentencia
La UE y Marruecos respondieron a la decisión del TJUE emitiendo una declaración conjunta donde expresan que “tomarán las medidas necesarias a fin de asegurar el marco legal que garantice la continuidad y estabilidad de sus relaciones comerciales”. El tribunal señaló que la anulación de los acuerdos no se aplicará durante un período de dos meses, dando tiempo a los socios comerciales para interponer un recurso de casación. Marruecos planea apelar la sentencia, según informó Reuters, citando a una fuente diplomática de alta jerarquía.
Hugh Lovatt, investigador senior de políticas del Programa del Oriente Medio y el Norte de África del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, declaró que resulta poco probable que una apelación cambie la posición del tribunal con sede en Luxemburgo, según informó EUObserver.
La decisión del tribunal fue muy esperada, ya que refleja las sentencias de diciembre de 2016 y de febrero de 2018 sobre el hecho de que los acuerdos de comercio y pesca únicamente aplicaban a Marruecos y no al Sahara Occidental. El Frente Polisario impugnó dos acuerdos entre la UE y Marruecos celebrados en 2019 y que fueron revisados para añadir a este territorio y sus aguas adyacentes.
El comercio total de bienes entre la UE y Marruecos alcanzó EUR 35,3 mil millones el año pasado. La UE es el mayor socio comercial de Marruecos, representando el 56% de su comercio de bienes en 2019. Aproximadamente el 64% de las exportaciones marroquíes —lideradas por maquinaria eléctrica y equipos de transporte (EUR 6,1 mil millones), agro-alimentos (EUR 2,2 mil millones) y productos textiles e indumentaria (EUR 1,4 mil millones)— se destinaron al bloque el mismo año, y el 51% de las importaciones de Marruecos provinieron de la UE. El comercio de servicios entre ambos alcanzó EUR 10,7 mil millones en 2019.
Marruecos exportó EUR 434 millones de pescado, tomate y melón del Sahara Occidental a la UE en 2019, según la Comisión Europea. La ganancia monetaria para Marruecos incluye derechos de acceso, apoyo sectorial de la UE y otras contribuciones de los propietarios de buques pesqueros. El reino de Marruecos perderá EUR 52 millones anualmente de fondos europeos, con el destino de unos 128 buques pesqueros de la UE pendiendo de un hilo. Estos buques —en su mayoría de España, pero también de Portugal, Francia, Alemania, Lituania, Latvia, Polonia, los Países Bajos, Irlanda, Italia y el Reino Unido— tienen permiso para pescar en la zona económica exclusiva de Marruecos bajo el acuerdo de asociación.
You might also be interested in
Senegal's Big LNG Gamble
This report explores Senegal's nascent liquefied nitrogen gas (LNG) industry by assessing the impacts associated with a new fossil fuel-based industry on the country's environment, economy, and society. It does this by responding to three questions: What have been the impacts of the development of LNG on Senegal to date? Is it viable for Senegal to invest further into an industry that is projected to decline? What risks can Senegal expect should it forge ahead with its LNG development plans?
Securing India's Copper Supply
This policy brief emphasizes the need for India to develop a comprehensive copper strategy.
Why Liquefied Natural Gas Expansion in Canada Is Not Worth the Risk
An analysis of the economic and environmental risks of liquified natural gas expansion in Canada.
Rethinking Investment Treaties
International investment treaties and their investor–state dispute settlement (ISDS) system are facing growing scrutiny. But what would an alternative system—one fit for the challenges of the 21st century—look like?